Los OgroCharts duran todo el verano
El Ogro se va a la Patagonia
Así es, querido e improbable público, me largo. Voy a congelarme el culo a la Argentina.
No prometo traer nada.
Las minutas de semejante travesía aparecerán oportunamente en este espacio, por lo pronto dejo algo para escuchar mientras no estoy.
Todo lo anunciado se encuentra en tiendas de música nacionales, lo que no… ya saben que hacer.
Godspeed You, Black Emperor!
Lift Your Skinny Fists Like Antennas to Heaven
Kranky Records, 2000
Una de las llamadas bandas de culto, GYBE! se ha granjeado la admiración de la mitad del mundo y la franca aversión de la otra mitad. Canadienses, activistas políticos, etiquetados por el sector etiquetador de la crítica como chamber rock –qué puta madre es eso?– el noneto más bizarro y enigmático que jamás haya parido el hogar del jarabito de maple, sacuden a la tierra con su mejor disco en el año 2000, justo antes de convertirse en la cosa inaudible que acabaron siendo.
De a 20 minutos por rola, este disco doble es la prueba irrefutable de que lo denso no ha muerto. Cuerdas, guitarras distorsionadas y varios speeches dignos de un Burroughs de malas narrados por voces aguardientosas. Silencios ominosos y grabaciones de campo. Mas o menos por ahí va. Escúchese en solitario, pero con la luz prendida.
Dicen que sus actuaciones estaban a toda mater, con despliegue multimedia y toda la cosa.
Alguna vez los acusaron de terroristas y los detuvieron al salir de un toquín, pero los soltaron…
…para mí que sí eran.
Jack Johnson
In Between Dreams
Brushfire Records, 2005
Llegué a Jack Johnson como diría Bob Ross por un accidente feliz, estaba en la cabina de audio de una tienda de discos, y accidentalmente puse este disco en vez de poner Guero de Beck. Las primeras tres canciones estaban tan bien que sin pensarlo más, lo compré.
Nunca fuí fan del college rock; odio a Rufus Wainwright, me repugna Ben Harper, Dave Matthews me pone al borde de una apoplejía, pero este tío… que bárbaro!.
Agarra a un ex-surfer, ex- cineasta, hippie hasta las cachas, ponlo dentro de un estudio en Hawaii junto con un pianista, un baterista y un bajista, échales encima al gran Mario Caldato Jr. et voilà: obtienes un excelente disco de folk pop. Canciones sencillas con melodías pegajosas pero todo armado con mucho estilo y un sentido de la melodía extraordinario.
Mejor que tus discos de Bob Marley y los Beach Boys juntos.
Tom Zé
Jogos de Armar
Trama 2001
Algunas personas miran a Tom Zé cono el enfant terrible del tropicalismo, y solo por que de todos los demás ilustres miembros de dicho movimiento, él fué el único que se interesó por hacer una verdadera propuesta experimental. Instrumentos fabricados con objetos cotidianos a lo Les Luthiers, ruidos generados por cualquier cantidad de cosas.
A Tom Zé el asunto de la popularidad no se le dió mucho hasta que David Byrne convirtió sus discos en pasto para intelectualoides neoyorkinos bajo su sello Luaka Bop, Jogos de Armar se llama así por que en el primer disco aparecen las canciones, y en el segundo vienen los tracks separados para que tu armes tus propias canciones. Yo ya hice un par, pero apestan.